Chequea la estrategia de la empresa e identifica dónde va a ser más necesario ese talento:

Si bien estamos hablando de personas con un gran potencial, será necesario un plan de desarrollo para que esas personas puedan brillar más aún, sea en su actual puesto o en otra posición.

Piensa que el desarrollo personal y profesional no solo pasa por un nuevo puesto:

Es posible enriquecer el puesto con nuevas responsabilidades o funciones, siendo importante que éstas realmente sean retadoras y aporten valor (tanto a la organización como a la propia persona).

Disponer de un mapa de puestos nos ayudará a identificar itinerarios de desarrollo para cada puesto de trabajo.

Nos ayudará a decidir posibles promociones o planes de carrera, identificando los conocimientos, responsabilidades y competencias que deberemos desarrollar en cada caso

Consensua el plan de desarrollo profesional: si no implicamos a los responsables directos en el desarrollo de sus colaboradores/as, difícilmente conseguiremos que éstos crezcan.

Las acciones que se lleven a cabo deberán estar planificadas, responder a un objetivo concreto y evaluable, determinándose cómo deben llevarse a cabo y en qué plazo, con el compromiso expreso de todas las personas implicadas.

También de la propia persona Top Talent, si no alineamos nuestro plan de desarrollo con sus expectativas, aumentarán las posibilidades de una posible salida laboral o, peor aún, la desafección y desencanto del propio Top Talent.

La formación continua es una de las herramientas más potentes y con mayor relación con el desarrollo del talento, pero recuerda que hay vida más allá de la formación.