Caso de éxito outdoor training: recuperando el espíritu de equipo.
La formación experiencial y en este caso el outdoor training tienen la capacidad de generar resultados asombrosos cuando son aplicados de la forma correcta y con una acción hecha a medida de las necesidades de los participantes. En este artículo, os contamos un caso de éxito real de una formación outdoor training realizada por Equipo Humano para una empresa donde se percibía cierta injusticia organizacional.
Cuando una empresa se propone diseñar acciones a medida para cada uno de los colectivos, áreas o posiciones que la componen y destina la mayor parte de sus recursos a acciones para un área determinada, puede suceder que el resto de sus trabajadores se resienta. Puede que sientan que no se valora su trabajo y éste sentimiento contribuya a no sólo la desmotivación de los empleados, sino también a la forma de relacionarse los unos con los otros y a los resultados de su trabajo.
Cuando en una empresa se percibe injusticia organizacional, es muy probable que se genere una separación que rompa la cadena de valor en la empresa.
Os voy a contar el caso concreto de una empresa pública que acudió a nosotros con esta situación. Hasta el momento, las personas de cierta área de la empresa localizadas en diferentes delegaciones de Alicante, Valencia y Castellón, siempre habían funcionado como un equipo, pero la empresa había invertido la mayor parte de los recursos al desarrollo de unas posiciones y no tanto de otras. Involuntariamente se había estado contribuyendo a la separación entre los jefes de área y los técnicos y mandos intermedios (figura clave para la correcta coordinación del trabajo entre los jefes y los técnicos).
Pese a la comunicación por parte de los mandos intermedios de su malestar con respecto a la situación que ellos sentían como injusta, la empresa no sabía cómo hallar la mejor de las soluciones para gestionar la situación. Y es que, por un lado se había generado la rotura del equipo, y por otra se había empeorado el clima y las relaciones interpersonales, además de haber disminuido la confianza en la dirección y en la empresa. Con todo, el desempeño del área se había visto gravemente afectado, empeorando sus resultados.
Tras comentar con nosotros su situación, les planteamos una intervención para la mejora del servicio en el área de dicha empresa. El primer paso fue identificar cuáles eran los principales problemas a atender: falta de cohesión e integración de los colectivos que determinan parte de la empresa (jefes de área, mandos intermedios y técnicos); falta de comunicación horizontal y vertical entre los mismos; falta de compromiso o de identificación de los trabajadores con la marca de la empresa; ausencia de ese sentimiento de pertenencia que cualquier empresa desea conseguir; y por último, la necesidad de mejorar el liderazgo entre las personas que gestionan los equipos dentro del área, marcando de una forma clara y concisa un estilo de liderazgo propio de la empresa pública que nos ocupa.
Una vez identificadas las competencias a desarrollar, se pudieron plantear los objetivos que se perseguirían con nuestra intervención y en la que se basaría nuestra solución: “La aventura del liderazgo”.
La aventura del liderazgo fue una intervención desarrollada desde el área de formación experiencial outdoor training para desarrollar de la mejor forma posible las competencias entre los diferentes colectivos implicados en la situación, atendiendo al punto en el que se encontraban las personas del área.
Apostamos por fomentar el sentimiento de pertenencia hacia la empresa, resaltando el trabajo en equipo, la comunicación y la coordinación, así como el liderazgo (que en una segunda fase del proyecto se seguiría desarrollando en contexto indoor) desde una perspectiva que resultara un refuerzo positivo para las personas objeto de la intervención y participantes en la aventura a la par que motivadora. Por ello, se eligió La Aventura como la solución más idónea para llevar a cabo nuestra intervención.
En la acción formativa experiencial outdoor training “La aventura del liderazgo”, se organizó a las 110 personas del área en 4 grupos compuestos de forma heterogénea por las 3 posiciones a atender: jefes, mandos y técnicos. La división se realizó en estos 4 grupos de unas 30 personas para poder realizar la formación en 4 días diferentes y no paralizar el servicio que esta área de la empresa presta a sus clientes.
Los grupos de 30 personas se enfrentaron a una acción formativa diferente y especial que había sido diseñada para ellos y que además suponía vivir una experiencia de aventura. De esta aventura extraerían las claves para poder avanzar hacia la consecución de un equipo mejor. La Aventura consistiría en descubrir e ir completando las diferentes pruebas, seleccionadas para el desarrollo de las competencias definidas, a través de una ruta pedestre por la montaña.
Antes de empezar la ruta, los 30 participantes de cada jornada, se distribuyeron en 3 equipos y a cada persona se le asignó un utensilio diferente para poder contribuir en la orientación de su equipo a través de la ruta por la montaña que se iba completando a medida que se iban localizando diferentes puntos de control en los que los equipos debían enfrentarse a las pruebas antes mencionadas.
La experiencia vivida en la Aventura, se reforzaba tras cada actividad con una breve reflexión acerca de lo ocurrido en la resolución de cada una de las pruebas que los equipos iban superando. Además, mediante un trabajo indoor durante la tarde del mismo día de la Aventura, se lograba un análisis más profundo y una mayor asimilación de lo aprendido en el outdoor training. A partir de la visualización de la experiencia vivida por los diferentes equipos y del análisis de las reflexiones que se habían realizado, se propusieron ejercicios donde quedaron definidas las líneas de acción (competencias, valores, principios) sobre los que se quería definir el equipo participante así como las acciones y comportamientos que iban a permitir su avance como equipo (qué se iba a hacer, a qué se compromete cada uno a partir de la finalización de la formación).
¿Qué resultados se obtuvieron de la intervención mediante la formación experiencial outdoor training la aventura en este caso? Se creó el mejor contexto para empezar la búsqueda del modelo de liderazgo real en las personas agentes de la formación. Generalmente, en equipos que han tenido una evolución de liderazgo poco definida por la organización, les damos la oportunidad de experimentar el cambio de paradigma del “jefe de la tribu” a la “integración del jefe en la estructura del equipo” a nivel de: 1) Resultados, 2) Satisfacción socio-emocional, 3) Productividad, 4) Satisfacción de equipo y 5) Generación de valor al cliente. Las experimentaciones de cambio de paradigma se suceden a través de los ejercicios propuestos en la aventura, donde la provocación de la evolución en el estilo de líder se hace cada vez más evidente a la vez que se desarrollan las competencias del trabajo en equipo. De forma casi inmediata se pudieron apreciar mejoras en las relaciones interpersonales y/o al menos mayor predisposición hacia el trabajo en equipo.
La formación outdoor training había sido un punto de re-inicio para todos y había conseguido alinear sus visiones en una: la visión del equipo, habiéndose comprometido cada uno de ellos a poner en marcha acciones para su mejora.
Además, la Aventura permitió analizar el comportamiento de cada una de las personas objeto de la intervención así como el funcionamiento de los diferentes equipos con el fin de poder asesorar objetiva y profesionalmente el plan de desarrollo que la empresa debía tener en cuenta para el seguimiento del equipo, y así poder lograr lo que a día de hoy se apuesta por mantener: el avance del equipo hacia su mejora continua.
Si tú también quieres vivir una auténtica Aventura a la vez que mejoras las competencias de tu equipo contáctanos sin compromiso y te contaremos cómo podemos diseñar una acción outdoor training adaptada a ti. Haz click aquí para conocer más.
Nuria Gámez – Consultora Equipo Humano – nuria.gamez@equipohumano.com
