La formación para afrontar el estrés y el cuidado de la salud mental ha sido la gran protagonista del primer semestre en Equipo Humano.
Este artículo podríamos llamarlo: No me chilles que no te veo, Crisis Silenciosa, Sueños derribados, Anomalías emocionales…, pero quizás el título sea lo de menos.
Lo que está claro es que la susceptibilidad de las personas está en alza y en muchas ocasiones no lo vemos o no lo queremos ver.
No soy escritor, soy psicólogo y durante el último año he visto como los indicadores de estados emocionales desajustados iban aumentando de forma progresiva.
El aumento del consumo de ansiolíticos, antidepresivos, tasa de suicidios, etc., no ha hecho más que aumentar.
Y vaticino que seguirá en aumento durante los próximos meses.
El aumento de los indicadores en estos últimos meses no es debido al azar, sino que está relacionada directamente con un estrés continuado que termina por desencadenar en una situación emocional insostenible, es lo que denominamos la crisis emocional.
Una crisis que hay que afrontar, al igual que se afronta la crisis económica, con recursos para aprender de esta nueva realidad.
La salud mental genera una buena economía, pero no la economía por si sola general una buena salud mental.
El COVID-19 ha venido para demostrar la fragilidad mental que tenemos, y la importancia de la higiene mental, aspecto que siempre había pasado desapercibido en las empresas.
Equipo Humano ofrece herramientas para afrontar el estrés y mejorar la salud mental de los empleados/as en sus formaciones experienciales.
Nosotros tuvimos la ocasión de observar a través de nuestros Programas de Mental Fitness, por donde han pasado en sesiones de formación más de 300 personas, como estás agradecían poder contar con herramientas para superar determinadas situaciones de incertidumbre, preocupación, miedo, ansiedad, hiperactividad, etc.
En estas formaciones online, distribuidas en pequeñas cápsulas de dos horas, trabajamos con las personas la forma en la que son capaces de detectar sus emociones, gestionarlas, y sobre todo, saber reconocer cuáles intentan ocultar.
Ya que nuestro sistema educativo nos ha enseñado que sentirse triste es algo negativo, pero en realidad es el estado de tristeza continuado es lo que es negativo.
La gestión emocional se ha tambaleado en todos los niveles de las empresas.
En los Programas Mental Fitness, no solo están participando personal base o mandos intermedios, también directivos que se habían vistos desbordados por la gestión emocional de sus equipos y que de alguna manera tenían que recuperar las emociones positivas compartidas.
Sí, la pandemia ha hecho mucho daño a nivel de equipo de trabajo.
Se ha fomentado mucho la solidaridad, pero también se ha visto mermada la empatía, la asertividad, la comunicación, creando escenarios de absoluta deslealtad a los compañeros/as del trabajo y aumentando de forma desmesurada los “corrillos” donde se criticaban a otros compañeros/as que después se les sonreía.
Estas circunstancias han generado espacios de desconfianza, donde en ocasiones ya no sabías con quién estabas trabajando.
El Shinrin Yoku o Baños de bosque, fue la continuidad de esos programas.
Técnica desconocida en nuestro país y muy practicada en Japón, y que aporta mucha estabilidad emocional.
Inmersos en un bosque los participantes son capaces de parar el reloj mental y oxigenar su cerebro para mejorar la estabilidad y el equilibrio, limpiando los pensamientos rumiantes, relajarse con técnicas sencillas,.
Meditar sin tener que estar adscritos a ninguna religión en especial. Sencillo de practicas y con resultados increíbles.
Por eso digo «No me chilles que no te oigo», pues las personas tienden a realizar lo que se denomina la agresión desplazada, que es irracional y desencadenante de un gran aljibe de emociones negativas que terminan pagando otras personas que no oyen porque no entiende a que hace referencia esa agresión.
¿Quieres implantar un programa de formación en estrés y salud mental en tu organización?
Antes de comenzar, un consejo:
Dedícate 15 minutos diarios para ti, para pensar, relajarte, percibir como te sientes y en ese momento, toma perspectiva de las cosas, no te dejes invadir por las personas negativas, y toma el timón de tus emociones.
Dedica tiempo a escuchar el silencio, una de las cosas que casi nunca practicamos.
El silencio te hará grande.
José Enrique García, Director General de Equipo Humano.
