LA INQUIETUD por definir el talento me persigue desde hace años. Mucho he estudiado al respecto y casi siempre llego a la misma conclusión. El Talento se define en función de las necesidades que tiene la empresa, de sus clientes, de la forma de funcionar, del estilo de liderazgo, del puesto de trabajo, etc. ¿Podríamos llegar a un consenso sobre los ingredientes básicos y genéricos del Talento?.
Desde mi punto de vista existen tres variables que bien pueden definir ese talento de forma global y que las tres están sometidas por una cuarta que soslaya dicho entramado: capacidades, compromiso, acción y velocidad.
Necesitamos conocer las capacidades necesarias que son requeridas por el puesto de trabajo que la persona va a ocupar. La persona no solo debe cubrir con esas capacidades, sino llegar a un nivel de excelencia superior que le haga extraordinario en su puesto de trabajo.
Sentir el compromiso con la empresa, con el puesto de trabajo, con las tareas que realiza, etc. Estamos hablando que su pasión, su elemento como diría Ken Robinson estén alineadas con las determinadas por la compañía. Posiblemente esta sea la variable más complicada de fomentar en las personas, pues alinear pasión con estrategia empresarial resulta realmente complicado pero ese es nuestro reto. La tercera, es la acción. Puede disponer de muchas capacidades, de mucho compromiso, pero si actúo, el resto de variables no son válidas para definir a una persona con talento. Necesitamos encontrar un equilibrio como todo en esta vida, entre las tres variables.
Yo personalmente añado una cuarta variable que mediatiza el desarrollo de las tres últimas, y es la velocidad de desarrollo dentro de la organización. Necesitamos a personas que tengan un recorrido establecido pero en un periodo determinado. No podemos estar esperando mucho tiempo a que se despierte «la bestia» del talento, eso sí, debemos de facilitar todos los medios para que este despertar se produzca lo antes posible pero con una fecha de caducidad.
Capacidades, compromiso, acción más velocidad de desarrollo son la fórmula perfecta para detectar y desarrollar el talento en nuestras organizaciones.
José Enrique García Director General de Equipo Humano
Vía El Mundo: Artículo Aquí.