Una de las grandes preguntas que se hacen actualmente muchos empresarios y directivos a la hora de analizar sus plantillas es: ¿cómo detectar el talento dentro de mi empresa? . Hace no mucho tiempo éste era un tema irrelevante, se daba por supuesto que el talento estaba únicamente en la cúspide de las organizaciones, en los puestos directivos. Afortunadamente, hoy somos conscientes de que el talento se encuentra diseminado por toda la organización y de que encontrarlo y desarrollarlo es, por decirlo así, El Dorado que todo director de recursos humanos habilidoso debería perseguir. El talento oculto en las organizaciones es la gran mina de diamantes en bruto que toda empresa o institución debería saber detectar y aprovechar.
Talento viene de la palabra en latín “talentum”, que se usaba para definir una moneda de cuenta. Esa noción de valor abstracto de mercado ha prevalecido, aplicada hoy a personas. Una buena definición actual de talento podría ser: inteligencia, aptitud o capacidad para determinada ocupación. El talento puede estar asociado a una habilidad innata, sin embargo está más que comprobado que cualquiera puede desarrollar su talento con la práctica y el entrenamiento precisos.
Dicho esto, ¿cómo detectar el talento que tiene mi empresa?
1. DEFINE QUÉ ES TALENTO
Talento es una palabra tremendamente manida y ha sido tan mal utilizada que sus connotaciones artificiales son una cortina de humo que nos impide ver su auténtico significado. El talento no existe sin más. El talento por sí mismo no es nada. El talento es aptitud para algo en concreto.
Por lo tanto, lo primero que debes hacer antes de lanzarte a la búsqueda del talento en tu plantilla es definir qué es exactamente el talento en tu organización. ¿Talento para qué? ¿Es desempeño? ¿Es compromiso? ¿Es potencial? ¿O es una combinación de varias cualidades? Lo más habitual es medir el talento en función del desempeño y del potencial de la persona en la empresa. Pero cada empresa es un mundo y lo que para una no vale gran cosa para otra puede ser un valioso tesoro. Saber qué es talento para tu empresa te ayudará a dibujar un mapa. Éste es el primer paso para ubicar a las personas dentro de ese mapa.
2. SONDEA TU TALENTO.
Una vez tu empresa conoce exactamente cuáles son las aptitudes que considera talentosas, debe someter a las personas a una serie de test que permitan ubicarlas más tarde en el mapa. Cada vez más empresas recurren a la creación de un assessment center interno (procesos de evaluación situacional) como forma de medir las aptitudes de los candidatos internos y prever su evolución y respuesta en situaciones futuras a las que todavía no se han enfrentado. Dicha iniciativa puede componerse de una entrevista por competencias o una entrevista de incidentes críticos, una sesión de técnica en basket o, por qué no, un “escape room”, técnica desarrollada por Equipo Humano en el último año para medir diferentes competencias. Diseñar tu propio itinerario de pruebas acorde con lo que quieres evaluar es la mejor forma de acertar con el contenido.
3. CLASIFICA TU TALENTO.
Ahora sí. Una vez los candidatos internos han pasado las diferentes pruebas podemos clasificar a las personas. Para hacerlo adecuadamente se pueden emplear diferentes herramientas. Yo te recomiendo la Nine Box Grid (figura 1): en función de las puntuaciones obtenidas en desempeño y potencial, tus candidatos se situarán en uno de los nueve cuadros del talento que define esta herramienta.. El cuadro más importante es aquél que está en la punta de la bisectriz que se denomina Desempeño Estrella y que recoge a las personas más talentosas según tu propio sistema de medición y clasificación. También es interesante contemplar la cualidad prometedora y únicamente la que tiene un desempeño medio.
4. PREMIA EL TALENTO.
La clasificación del talento de nuestro equipo proporciona una información valiosísima a la hora de contemplar promociones internas, identificar puestos clave y mejorar el desempeño de determinadas personas. También permite desarrollar programas de desarrollo del talento a medida para personas concretas o para segmentos determinados de personas dentro de la plantilla.
No lo olvides: el talento se encuentra en toda la empresa, independientemente del puesto o escalafón que ocupen las personas. Éstas son variables que no mediatizan ni influyen en el talento de las personas. Nunca lo hicieron, y hoy menos que nunca.
Jose Enrique García – Director General de Equipo Humano